¡Hola a tod@s!
Esta entrada es fruto de un vídeo. Un vídeo que he visto y
que gratamente me ha impresionado. Su título MENSAJE PARA TODA LA HUMANIDAD. Este video
pulula a gran velocidad por la red. Es agradable de ver e impresiónate. Parece
que está formulado para este momento actual. Este periodo de tiempo en el que
parece que el mundo se ha vuelto loco.
Pero un poco por mi carácter no me quedé ahí, en el simple
visionado de dicho vídeo. Así que quise investigar un poco más. Como resultado
de esta investigación, llegó a mis manos otro vídeo. Este no es otro que el
discurso final de la película EL GRAN DICTADOR. Por Charles Chaplín del año
1940.
El resultado sorprendente. Pues resulta que el primer video
visionado, ese que tanto me impresionó no era más que un homenaje, una versión
del anterior. ¿Pierde mérito el primer video? Pues yo diría que no. Solemos
pensar que descubrimos las américas cada vez que creamos algo. Cada vez que
formulamos una solución a un problema. Y lo peor de todo, es que nos solemos
equivocar.
Una vez, hace ya mucho tiempo. En mi cabeza quedaron
grabadas a fuego unas palabras. Eran parte del discurso de un poeta callejero,
y decían algo tal que así;
“que lo original ya estaba escrito. Que no hablásemos del
amor, hasta cumplir 80 años. Que escribiésemos sobre cualquier otra cosa… la
calefacción, el cielo…”
Y pienso que no se equivocaba. Pues desde que el mundo es
mundo, sus problemas suelen ser los mismos. Por eso, desde el punto de vista creativo. No me agobio por la originalidad.
Ni por hablar siempre de los mismos temas; el amor, el paso del tiempo, la
muerte… son temas que siempre están ahí, que forman parte del mundo. Y que como
no, necesitan ser revisados o simplemente un nuevo punto de vista. Y desde el
punto de vista de un curioso.
Necesito informarme, aprender. Ver con
mis ojos, sentir lo que otro ha visto ya o ha experimentado. Sin importarme lo
más mínimo la originalidad.
Pues lo más importante será ese nuevo enfoque que
este autor le ha dado, será su manera de contarlo o simplemente el momento en
que fue contado. Por eso pienso que no debemos rechazar nada. Debemos acumularlo,
archivarlo en nuestros pensamientos. Para que una vez razonado, esto sea tan
nuestro como del propio autor. Y darnos cuenta que muchas veces lo que más
importa, es tener la valentía de haberlo contado.
Ese lo vi yo justo ayer! me quedé tan flipada que lo colgué en todas mis redes sociales, espero que si lo ve mucha gente, pueda cambiar aunque sea un poquito la manera de ver el mundo y el pasotismo que se tiene ante las adversidades!
ResponderEliminarGracias por entrar y leer la entrada. eso lo primero.
ResponderEliminarla verdad es que el vídeo también me fascinó. y como no fue compartido también.
David tienes que ver la película! :)
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