Cuando mi cuerpo
parta
Que no sea en
silencio.
Que una voz, se
escuche
Hasta mi último
lamento.
Al silencio, yo lo
odio.
Para nada lo respeto.
No lo quiero
No lo deseo.
El silencio me mata.
Ahoga mi mente
Tampona mi sentir.
Le quita el sentido
A vivir.
El silencio para los
muertos.
Ellos ya nada tienen
que decir.
El silencio para los
burros.
De ellos ya nada
quiero oír.
Silencio
Enemigo de la vida.
Del vivo
Del que quiere vivir.
Yo no conozco buen momento
En donde, el silencio
esté presente.
Pues la sonrisa del
niño
No es muda.
Ni silencioso es el
deseo.
Hasta los buenos
besos
Se han de sentir.
Silencio.
Que mis palabras te
queden presentes.
Pues a ellas me
remito
Pues con ellas te
fulmino.
Pues cada vez que
suenen
En una mente.
Tranquilo he de estar
Al saber que tú
No formas parte del
presente.
Que nuncs nos venzan los silencios. Hermosas tus palabras que dominan al silencio. Un saludo.
ResponderEliminarMe ha gustado como escribes, el silencio para mi puede ser hermoso pero siempre necesitamos del sonido
ResponderEliminarun beso
Un gran poema David. Ese silencio negativo murio con tus palabras. Me ha gustado mucho hermano
ResponderEliminar