Palabras por el mundo

jueves, 27 de febrero de 2014

Poema



“No existen suficiente días, para jurarte mi amor.
Ni tiempo necesario, para apreciar tu cuerpo”

Es todo tan limitado, tan inexacto…

Ayer éramos dos desconocidos, que sólo cruzaban miradas.
Ayer nos hablamos, nos deseamos…
Ayer nos deseamos, nos despedimos…
Ayer nos cogimos de la mano, nos enamoramos…

Y ahora… recuerdo, anhelo, aprendo a marchas forzadas.
Lo intento, fracaso y me levanto.

Es todo tan limitado, tan inexacto…

Pero sé que al pasado no he de volver.
Que nada debo de cambiar.
Puede que lo nuestro jamás llegaría
A ningún lugar.

Por eso… sólo miro al futuro.
Me comprometo con él, con nosotros.
Por eso, he de luchar.

Es todo tan limitado, tan inexacto….

He visto a aves perder su vuelo.
A titanes deshacerse en arena,
Formar a sus pies desiertos.
 He visto primaveras, tornase en inviernos.

Es todo tan limitado, tan inexacto…

Que sólo me queda luchar
Intentarlo, fracasar…
Volverme a levantar.
Para juntos levantarnos los dos
Y con el primer aliento a mañana
Decirte:

“Te quiero, te deseo hoy tanto o más que ayer. Y creo que un poco menos que mañana.”  

martes, 11 de febrero de 2014

Al mar tiempo, agua.


En Galicia llevamos nos días, en donde el sol anda tímido. El agua y el viento nos desbordan. Lluvia y viento a partes iguales. Fantástica combinación, perfecto cóctel que nos lleva acompañando todo un mes.

Un mes pisando en mojado. Un mes despeinado por el viento. Un mes con las manos frías y con el corazón a medio latir.  Se podría pensar que este tiempo nos mata lentamente. Que ahoga nuestras almas. Asfixia  nuestras mentes. Pero el carácter del gallego hace que este clima que nos acompaña, nos fortalezca en ilusión pasiva. En el placer de esperar nuestro momento, EL MOMENTO. Ese instante, día o semana en que Lorenzo (el Sol). Pierda la vergüenza, se anime a acompañarnos, tueste nuestra piel, nos regale el cálido calor de su manto. Una ilusión pasiva que nos mantiene vivos. Porque como buenos pacientes, sabemos que debemos seguir. Mantenernos firmes e intensos, hasta que llegue nuestro momento.

Y mientras tanto… al mal tiempo, agua. Líquido elemento acompañado de patatas, de carnes, verduras y grasas. Formando una conjunción perfecta. Un caldo que al olor, alimente el alma. Guisos que nos amparen del frío, que nos arropan por el día. Que nos recuerdan por las noches, que nuestro estómago no está vacío.  Pucheros, que nos regalan el sabor perfecto para pasar este tiempo. 

jueves, 6 de febrero de 2014

Cansancio


Apagada la cabeza
Ahora pienso con recelo.
El cansancio que me ampara
Ya no abandona mi cuerpo.

Siento sueño.
Siento duelo
En mi espera.

Cerrar hoy mis ojos
Y sembrar el campo de sueños.

Noche que me esquivas
Y vuelves el día profundo.
Cansado mi cuerpo
Golpeando mi pobre cerebro.

Y aunque no quiero
Un sueño eterno.
Yo  sólo deseo
Cinco minutos más

En esa, que yo llamo cama.